Esta tarde, el ministro del Interior y Seguridad Pública, Víctor Pérez, junto al subsecretario de Interior, Juan Francisco Galli y el Alto Mando de las policías llegaron hasta Cañete para reunirse con la familia de Moisés Orellana, el joven de 21 años asesinado el pasado 8 de septiembre por un grupo de terroristas.

Tras el encuentro, el Jefe de Gabinete manifestó que “hemos querido estar con la familia para asumir el compromiso de colaborar con todo lo que son nuestras voluntades y capacidades”.

Para eso, sostuvo que se colaborará fuertemente con la justicia y el Ministerio Público para encontrar a quienes lo asesinaron. “Los culpables del asesinato de Moisés tienen que ser puestos a disposición de la justicia, tienen que ser castigados por la justicia porque el dolor que han causado y el drama que han causado a una comuna como esta, Contulmo, Cañete, comunas tranquilas, de gente de bien, es algo absolutamente inaceptable”.

“Yo creo que él tiene que transformarse en un símbolo de la paz, de lo que ninguna familia debería sufrir en nuestro país”, dijo el ministro Pérez, asegurando que existe una especial preocupación para coordinar medidas que hagan más eficaz la acción policial, pese a que en el Congreso no se han aprobado un conjunto de iniciativas para entregar más medios y herramientas a los uniformados. “Nosotros vamos a insistir en esa materia porque creemos que es fundamental que el Ministerio Público y las policías tengan las herramientas necesarias”.

Agregó que la violencia “no representa ninguna buena causa” y por eso se reunieron con todos los alcaldes de la zona para trabajar en conjunto. “Son las primeras autoridades que tiene al frente la ciudadanía y por lo tanto, tenemos que reforzar el trabajo de los municipios para que verdaderamente la paz y la tranquilidad vuelva a esta hermosa provincia a la cual le tengo especial aprecio, cariño y recuerdo”.

Durante la jornada, las autoridades también se reunieron con otras víctimas de la violencia, con “emprendedores que han visto quemadas sus cabañas, destruidos sus negocios, víctimas también del terror, de la violencia, la intolerancia, víctimas de algo que nadie puede asumir que está relacionado a una buena causa”.

“Lo que nos transmite la familia, lo que nos transmite el alcalde, el intendente, el gobernador es una situación de miedo, incertidumbre que tenemos que superar. Es por ello que estamos aquí conversando, escuchando, y asumiendo la responsabilidad de poder llevar adelante todas las políticas que nos permitan que la gente viva en paz, que está zona hermosa de la provincia de Arauco sea para todos un lugar para vivir en tranquilidad”, finalizó el ministro Pérez desde la municipalidad de Cañete.